Chespirito y la Ch fue una casualidad



Alguna vez alguien le dijo que era un "Pequeño Shakespeare”, por su chispazo. Hoy será recordado como uno de los comediantes más famosos de América.
Roberto Gómez Bolaño fallecido este viernes a los 85 años. Creó un universo de personajes inolvidables enmarcados alrededor de una letra, la Ch, que lo hizo popular a lo largo de su vida artística.
El Chavo del Ocho es de los personajes más recordados, que tinenen implícita esta letra en su vestuario; un niño que vivía en una vecindad, alrededor de personajes que lo cobijaban en un barril, con su mejor amiga, la Chilindrina.
Otro personaje que enmarcó su vida fue el Chapulín Colorado, que aparecía de la nada con solo pronunciar: "Y ahora quién podrá ayudarme".
Gómez, a quien apodaron 'Chespirito' , contó en alguna ocasión que un director con quien trabajó le puso ese apodo, comparándo su creatividad con el escritor británico William Shakespeare.
Chespirito los agrupó a todos. Creó a un ladrón tonto y noble llamado Chompiras con un compañero no menos frustrado, El Botijas, y otro despistado, Chaparrón Bonaparte, reconocido por sus particulares chiripiorcas.
La Ch de Chespirito, aunque al principio fue una casualidad, terminó siendo parte recurrente en la creatividad de Gómez Bolaños; esta letra quedó plasmada en expresiones que se pusieron de moda, como el ¡Chanfle!

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